Este mes nuestra portada se la dedicamos a una mujer fuerte, poderosa, y una inspiración para las mujeres y personas en general, Manisha Pratapsinh.
La historia empresarial de Manisha Pratapsinh comenzó con una simple llamada telefónica entre socios: notaron un vacío en los servicios de construcción civil en Mozambique y decidieron llenarlo. Comenzaron sin grandes objetivos, solo una respuesta práctica a una necesidad local, pero esto sentó las bases para un negocio que ahora está marcando la diferencia en la industria de la construcción.
No contenta con una sola empresa, Manisha incursionó en el sector del transporte, iniciando una compañía de autobuses. ¿Por qué? Porque no todos tienen acceso al transporte privado en Mozambique, especialmente en áreas rurales. Su motivación era comprensible: abordar un problema que ella misma enfrentaba al transportar materiales de construcción.
Ser mujer en industrias dominadas por hombres trajo consigo su propio conjunto de desafíos. Manisha comparte sin tapujos las luchas y cómo las navegó. No hay relatos heroicos, solo la realidad cotidiana de demostrarse a sí misma en un espacio dominado por hombres.
Lo que hace que la historia de Manisha sea identificable es su mensaje simple pero poderoso: se puede lograr cualquier cosa, independientemente de dónde se sea, cómo se luzca o cuál sea tu origen. No es una gran filosofía; es una mentalidad que lleva a su vida diaria para enfrentar los desafíos de frente.
Pero, ¿cuáles son los principios que guían el enfoque comercial de Manisha? Humildad, compromiso, honestidad y liderazgo. No son ideales elevados, solo valores prácticos que incorpora en sus operaciones diarias, con el objetivo de liderar con el ejemplo.
Todos tenemos diferentes motivaciones para hacer las cosas. La mayoría de las veces, los estímulos son personales o financieros, algo frecuente entre las personas que inician sus propios negocios. Sin embargo, hay momentos en los que algunas personas aferran el espíritu empresarial para lograr objetivos más significativos que ellos mismos.
Un ejemplo claro de este tipo de individuos que ven el panorama general es Manisha Pratapsinh. Originaria de Mozambique, Manisha se trasladó desde su país de origen a Portugal y después Francia antes de establecerse en Madrid, España.
Manisha nunca ha perdido el contacto con su país, en el que fue testigo de primera mano de cómo la industria del transporte de Mozambique no estaba proporcionando suficientes servicios para el público. Su especialización en maquinaria de construcción civil requería transportar equipos hacia y desde diferentes lugares, lo que encontraba con dificultades debido a la falta de servicios en Mozambique.
Claramente, Manisha no podía permitir que esto continuara así. Con su habilidad para determinar lo que sus compatriotas mozambiqueños necesitaban y deseaban para llevar una vida mejor, se embarcó en una misión para proporcionar un servicio de transporte privado que los llevara a los lugares a los que necesitaban ir.
«Fue una forma de satisfacer las necesidades de las personas en áreas rurales con respecto a sus trabajos. La idea surgió a través de una llamada telefónica entre mis socios y yo (derivada de la falta de provisión de estos servicios)», compartió la empresaria con sede en Madrid.
Agregó que la transición de la construcción civil al transporte no fue tan difícil como parecía, ya que vio de primera mano en qué áreas necesitaba concentrarse para asegurar el éxito de su compañía de autobuses.
Al igual que otros empresarios bien preparados que en algún momento de sus vidas se aventuraron a algo nuevo con pasión, Manisha Pratapsinh hizo su tarea para su compañía de autobuses. Estudió el mercado e identificó áreas en Mozambique que demandaban el servicio con mayor urgencia, asegurando que las personas llegaran a sus trabajos u otros destinos de manera fluida y rápida.
Pero su compañía va más allá de proporcionar el servicio de transporte diario. Manisha también vio una oportunidad para que su negocio ayudara aún más a sus compatriotas mozambiqueños: equipándolos con un medio de vida.
«Todos mis empleados son de mi país, ya que la tasa de desempleo en Mozambique es del 25 por ciento, y mi objetivo es ayudar a la comunidad», dijo Manisha.
Sus esfuerzos no pasaron desapercibidos, ya que NY Weekly la nombró Mujer de la Semana. Su historia es un presagio de cambio y desarrollo, demostrando que las mujeres pueden destacarse en lo que a menudo se considera industrias dominadas por hombres.
Aún así, Manisha no estuvo completamente exenta de prejuicios basados en el género. Pero encontró la manera de superar la discriminación y convertirse en un ejemplo para las mujeres de todo el mundo.
«Durante mucho tiempo, oculté mi lado empresarial por temor a lo que la gente pudiera decir y juzgarme, ya que es un área dominada por hombres. Hasta que las circunstancias de la vida me llevaron a mujeres fuertes que me animaron a hablar más sobre Manisha, la empresaria», dijo.
Manisha es una firme creyente de que las mujeres son capaces de alcanzar sus metas, sean cuales sean. Aunque la sociedad ha sido más aceptante al romper barreras de género, aún queda camino por recorrer, por lo que aconseja a mujeres fuertes que continúen luchando por un lugar en la sociedad.
Durante siglos, las mujeres han estado en el centro de la discriminación basada en el género, con la sociedad pensando que son el sexo más débil, pero a medida que el mundo avanza hacia la era moderna, las personas han dejado de lado los conceptos erróneos sobre las mujeres y están presenciando cómo están realizando cambios significativos.
En Mozambique, una pionera en el mundo de la mujer ha dejado su huella en la industria del transporte.
Se mudó de Mozambique a Portugal y luego a Francia antes de instalarse en Madrid, España. Pero su pasión por provocar cambios dentro de su país permaneció. Como verdadera defensora de la diversidad y la inclusión, Manisha Pratapsinh aspira a difundir el mensaje de que el origen, la etnia o la apariencia física de uno nunca deben impedir a nadie alcanzar sus metas. Manisha cree que las personas pueden triunfar independientemente de su origen, y su ejemplo envía un poderoso mensaje de empoderamiento e igual.
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